Conversando sobre cuán extensa puede ser una serie, o una película o un libro, llegamos a la conclusión de que la historia es un renglón, lo demás es el relleno. Sin embargo, ese relleno es la magia de la historia. A continuación, les presento un ejemplo de una historia que se sintetiza en pocas palabras pero que puede extenderse hasta ser un texto considerablemente más largo. Llamaremos a esta historia:
MAT EN EL ESPACIO
A)
Mat salió de
noche, se emborrachó y chocó su auto.
B)
Mat salió de
noche, bebió cerveza, fernet, quizás vino tinto, quizás vino blanco. No pensó
en las consecuencias que esa conducta pudiese ocasionar, teniendo en cuenta
que debía volver a su hogar en automóvil. Finalmente, acabó por emborracharse
bien, bien borracho. Subió a su auto e increíblemente llegó a su hogar, pero
chocó dentro del garaje.
C)
La noche es
una acompañante siempre tentadora para aquellos que sienten, cada viernes, una
ansiedad irrefrenable por salir a refrescar el garguero. Mat es así. Desde que
abre los ojos siente desde adentro del pecho como una ardillita tímida que pide
permiso. Con las horas, la ardillita perderá la timidez y exigirá lo que le
corresponde hasta saciarse. Para terminar, el pérfido animalejo, no sabrá ni
qué era lo que exigía diez horas antes. Ocurrió entonces que Mats, ansioso como
estaba, arribó a un bar. Sereno al comienzo, bebió los primeros sorbos de
cerveza como quien prueba la temperatura de un té caliente. Litros más tarde,
ninguno de estos recaudos estarán presentes en Mats. Atiborrado de cerveza, ron, vino tinto y blanco, y hasta una copa de espumante, impactará contra la pared
interna de su garaje, sumamente borracho y con un sándwich colgándole de la boca.
D)
“¡Al fin
viernes!” reza una historia de instagram en la brillante pantalla del celular
de Mats. Una chica sonriendo en su trabajo, agitando los brazos en loop. Él
apagó su cigarrillo mañanero en la tierra seca de la maceta de la oficina. No
pensó en lo vulgar de exhibir la vida en las redes. No pensó en que aún falta
todo un día de trabajo. Tampoco pensó en quién juntará las colillas que acaba
por acumular cada tarde en la maceta. Prendió la computadora y siguió con su
labor sonámbula, abstraído, mecánico, peligroso: mucho margen de error, poco
margen de acierto.
Si pudiera escapar de esta
oficina, de este jefe, de estos compañeros. No volver a ver jamás el gris de la
autopista colmada de autos humeantes, de colectivos llenos, de camiones
destartalados. Qué espera de esta vida. ¿Necesita acaso un milagro?
No. No necesita ninguna clase de
milagro. Necesita una borrachera. ¿Algo más milagroso que una borrachera? Mat
no lo duda, una vez acabado el trabajo, lleva a su boca un cigarro y pisa el
acelerador. Llega a un bar lejano, allí lo conocen, lo tratan bien. Bebe tímido
al principio, desmesurado al final.
Luego de una serie incalculable de vasos,
se pone de pie, tambaleante. Busca en sus bolsillos las llaves del coche.
Alguien advierte que está demasiado bebido para manejar, sin embargo no hace
nada. Como una flecha dorada atraviesa las calles de una noche fría y azul. El
viento que ingresa lo despabila y siente hambre. Frena en un kiosco y continúa
viaje con un pebete agarrado en los dientes. Sube la radio, dobla esquinas,
baja cambios, sube cambios. Su nave espacial deja una estela de estrellas
fulgurosas por el camino. Lo saludan de planetas lejanos algunos
extraterrestres que también viajan ebrios. Todo fluye entre veloz y armónico.
Las galaxias inmensas lo emocionan hasta la lágrima. Logra ver, solitaria y
flotante en el espacio estrellado, la entrada a la nave madre. Direcciona el
volante de su objeto volador, muerde el pebete, e impacta contra la pared del
garaje de su casa.
Espectacular! Genial lo de la historia de instagram y que no aguante más el laburo😂.
ResponderBorrarOjalá existiera tristregram
Podemos continuar con el diseño de Tristegram
BorrarAlgo mas milagroso que una borrachera?
ResponderBorrar